La página de inicio es una de las más importantes de tu web. Los usuarios de internet pierden el interés demasiado rápido: si en 3 segundos no han visto algo de interés que les haga quedarse en tu página web, cerrarán la pestaña para no volver. Es por esto que debemos pensar bien en el contenido, la estructura, el objetivo y la llamada al a acción que vamos a utilizar en esta página para que sea lo más atractiva y eficaz posible, y haga que nuestro potencial cliente se quede más tiempo en nuestra web.
El objetivo
Empecemos estableciendo lo que es más importante en tu página de inicio. No vas a poder estructurarla ni crear el contenido adecuado si no sabes lo que quieres que hagan los usuarios al llegar a esta página. Normalmente, el objetivo principal de tu Home debe ser, además de captar la atención, conseguir suscriptores a tu newsletter o llevar a ese cliente potencial que está navegando por tu web a tu página de servicios. Puedes elegir que realicen una o ambas acciones. Pero te recomiendo que limites ahí las posibles acciones que se pueden hacer en esta página. Cuantas más opciones le demos al usuario, más se perderán y disminuirán las probabilidades de que sigan navegando.
Información básica
Aunque te voy a dar una estructura básica para tu web, te invito a que cojas papel y boli y, según las necesidades y tu modelo de negocio, apuntes la información básica que quieres incluir en tu página de inicio. Puede que vendas cursos online y para ti sea más importante incluir esto en tu página principal. O que vendas packs de fotos y este sea tu objetivo número uno.
O que no te interese conseguir suscriptores a tu newsletter pero quieras derivar a los usuarios a tu canal de YouTube para que se suscriban o a los post de tu blog porque ahí es donde más interactúas con tus seguidores.
Como te digo, la estructura es flexible, tú debes adaptarla a las necesidades de tu negocio.
La estructura
Bueno, vamos ya al meollo de la cuestión: cómo estructurar tu página de inicio. Voy directa al grano sin enrollarme más:
Tu propuesta de valor
Lo primero que debería ver un usuario que llega a tu web y no te conoce de nada es tu propuesta de valor. Se trata de contarle qué haces y para quién lo haces, de manera que se ubique y que sepa si lo que hay en esa página web es para él o no. Puedes seguir esta estructura básica: [Tu servicio] para [tu público objetivo] que quieren [beneficio prirncipal de tu servicio]. Por ejemplo, si fueses una coach de alimentación, tu propuesta de valor podría ser: «Coaching para mujeres que quieren mejorar su relación con la comida y vivir una vida sin restricciones». Este título puedes acompañarlo de un breve texto que explique en mayor detalle lo que haces o que invite a los usuarios a descargarse un recurso gratuito. Dependiendo de lo que elijas, irá acompañado de una llamada a la acción a tu página de servicios o a tu página de captura.
Puntos de dolor y beneficios
Ya tenemos la atención de nuestro cliente potencial. Ahora, lo más importante, es centrarnos en él y hablarle a su ego. Así como lo oyes. Los usuarios de una web siempre van buscando lo que puede haber en esta web para ellos. Tú de momento no les interesas. Es aquí donde entran en juego los problemas y necesidades de ese cliente potencial que resuelve tu servicio. ¿Cómo se siente ahora? ¿Qué problemas (que tu puedes resolver con tu servicio) tiene? ¿Cuáles son sus necesidades? Háblale de ellas y una vez lo hayas hecho, preséntale tu servicio como la solución a sus problemas.
Tus servicios
Ahora es cuando puedes introducir tus servicios, acompañados de un breve texto y una llamada a la acción, para llevar a tus usuarios a tu página de servicios o al servicio en concreto que les puede interesar.
Preséntate
Ahora que le has dado a tu cliente potencial toda la información que le interesaba, es el momento de presentarte como profesional y figura de autoridad que ofrece este servicio. Acompaña una foto tuya de un breve texto que te presente, de manera profesional pero sin olvidarte de ser cercana y humana. Todos apreciamos trabajar con personas y no con robots perfectos. No tienes por qué limitarte a contar tus logros profesionales o tu CV (que no le interesa a nadie). Puedes simplemente decir quién eres, cómo has llegado hasta aquí, y por qué haces lo que haces. Ya tendrás tiempo de explayarte en tu página de “Sobre Mi”
Testimonios
Llegó el momento de generar más confianza todavía. Recopila testimonios de antiguos clientes para que sean ellos los que hablen de ti y de los beneficios que ha tenido tu servicio en su vida. Si puedes conseguir testimonios en vídeo, mucho mejor, pues son mucho más efectivos a la hora de generar confianza. Si no se animan pero te lo envían por escrito, les puedes pedir una foto para acompañar el texto. Esta es, sin duda, una de las secciones que más ayudan a crear confianza, así que te animo a incluirla.
Tu suscripción
Si no has incluido la suscripción o llamada a la acción a tu newsletter arriba, te sugiero que la incluyas en la última sección de tu página de inicio. Tanto la zona superior como la inferior de tu página son las más calientes, y en las que el usuario tiene más probabilidades de realizar una acción, así que no las desaproveches.
Conclusión
Como ves, es una estructura sencilla, con la información esencial, pero bien estructurada y con el contenido adecuado para atraer a tu potencial cliente y hacer que pase a la acción. Insisto en que no es necesario que la sigas al dedillo, puedes añadir o sustituir cosas sin dejarte lo esencial: propuesta de valor, puntos de dolor, beneficios y testimonios.
Estaré encantada de leer en los comentarios si este post te ha ayudado y de responder a tus dudas. No te olvides de compartirlo con una amiga emprendedora a quien pueda ayudar.