Siempre que llegan estas fechas, no puedo evitar pensar en cosas que puedo hacer este mes (que suele ser más tranquilo en cuanto a carga de trabajo), para pasar Septiembre con calma y sin sentir que no llego a nada o que dejo mi negocio de lado.
Como siempre me gusta aprender de otras emprendedoras y de cómo gestionan sus negocios, he pensado que quizás mi planteamiento te ayudará.
Revisar objetivos.
Y con esto me refiero a objetivos económicos. Es algo que antes no hacía, porque lo hacía mal. Yo solo escribía un número que representaba lo que me gustaría ganar en un mes. Pero no le daba un propósito a ese dinero. Así que no había motivación ni para vender, ni para generar ingresos más allá de la necesidad.
Ahora lo hago de otra manera. Pienso en lo que me gustaría ingresar y hago una lista en la que escribo a qué destinaría ese dinero: ahorros, viajes, comida, inversiones… Es un ejercicio que me enseñó mi mentora Núria Castelló, y que ha supuesto un antes y un después a la hora de tomar decisiones, ser constante en mi comunicación y encontrar motivación para vender. No solo tengo un objetivo de ingresos sino que eso me motiva a crear una estrategia de comunicación y captación de clientes y me ayuda también a ser constante.
El día que no me apetece publicar, escribir, comunicar, o que acecha el síndrome del impostor, me pongo el sombrero de CEO que tiene que alcanzar esos objetivos para vivir la vida que desea, y no me lo pienso dos veces.
Diseñar un plan realista y flexible para comunicar.
Y digo realista y flexible porque de nada sirve que me ponga como objetivo publicar 5 días a la semana si sé que no voy a poder hacerlo. Con mi planteamiento de ventas trimestral, hago una planificación de los canales por los que voy a comunicar y el contenido que voy a crear.
No me pongo grandes metas, pero sí utilizo algunos trucos como convertir una publicación de Instagram en un post del blog, en un directo o una newsletter. Así mi mensaje llega a más personas, por más canales y con la mitad de esfuerzo.
Y por supuesto, también defino vías por las que puedo conseguir clientes de manera offline o a través de clientes pasados. Para crear una cadena de confianza en la que no dependa solo de algoritmos externos.
Revisar lo que ha funcionado y lo que no.
Cuando recomenzamos el trimestre podemos entrar de lleno en la vorágine de trabajo y no nos tomamos el tiempo de parar y mirar atrás. Creo que es importante hacer una recapitulación del año, ver qué es lo que ha funcionado en el negocio, lo que no ha funcionado, y aprender de ambas situaciones.
Quizás te has dado cuenta de que cierta manera de comunicar ya no está alineada contigo misma, quizás quieres cambiar o mejorar uno de tus servicios… agosto es un mes estupendo para dedicar un ratito a hacer estas reflexiones y sentir lo que tu negocio necesita con el tiempo suficiente para hacer cambios antes de la vuelta.
Poner mi web y mi Instagram a punto.
Quizás te pasa como a mí. Tengo mucho trabajo de clientes a lo largo del año. Entre webs, sesiones de fotos y seguimiento de webs prediseñadas, dejo mi página de lado.
Sé que hay cosas que quiero modificar, algún recurso gratuito que quiero planificar, y también es un momento ideal para revisar la estrategia de mi página, ver que todo funciona o rediseñar cositas que sé que quiero cambiar. En agosto, es cuando tengo tiempo para meterme de lleno en trabajo interno y de diseño y desarrollo para mí.
Estoy segura de que para ti también es un mes ideal para trabajar un poquito en tu marca. Ya sea modificar tu web, invertir algo de tiempo en crearla por fin, revisar tu estrategia o tus textos, te recomiendo que bloquees ratos a lo largo de estas semanas para ello.
Tu yo de septiembre agradecerá que hayas cuidado y pulido tu negocio en verano. No olvides que si necesitas hacerlo acompañada, las webs prediseñadas de Made By Soleil y la Guía de Copywriting está ahí para sostenerte y facilitarte el proceso. Siempre conmigo a un mail de distancia.
Espero que estas reflexiones te hayan ayudado o inspirado para dedicar un poquito de tiempo a tu negocio este mes.
Si algo quiero que te lleves de este post es lo siguiente: Cuidar de tu negocio es a tu vida profesional lo que el autocuidado a tu vida personal. Es necesario, es nutritivo y asegura que tu proyecto siga en pie.